Sexto día: Corfú, 13.05.06, sábado

Hoy es el cumpleaños de Lorenzo, mi marido, así que los primero fue desearle muchas felicidades. Luego lo de siempre, ducha, desayuno, paseo por cubierta ya que llegábamos a Corfú a las 9:30 h y teníamos que estar a bordo a las 17:30, así que teníamos por delante un largo día de disfrute.

Bajamos del barco y empezamos a andar, unos 20 minutos , nos metimos en las calles peatonales, Corfú se ve muy animado. Estuvimos en la Iglesia de San Espiridón, patrón de Corfú, conserva la imagen momificada del Santo Patrón en un sepulcro de plata labrada que es impresionante, como así las lámparas.

La Splanada enorme rodeada de algunos hermosos edificios entre ellos una edificación francesa llena de terrazas para tomar algo y descansar un poco, el día era bastante caluroso, nos sentamos en la terraza del Café Liston y nos tomamos un capuchino (€6,40 ) la vista a la Splanada era fenomenal, corría una agradable brisa y estábamos tan a gusto que nos entraba sueño, así que decidimos seguir. Estuvimos en la Iglesia de San Espiridón, patrón de Corfú, conserva la imagen momificada del Santo Patrón en un sepulcro de plata labrada que es impresionante, como así las lámparas. Entramos a una iglesia pequeña bizantina. Puerta de San Nicolás, Museo Arte Asiático (no entramos) de ahí a un mirador espectacular desde donde se ve la antigua fortaleza, imponente. Entramos en la Iglesia de la Virgen del Mandraccio, la iglesia toma ese nombre porque dicen que una imagen de la Virgen había aparecido flotando en Mandraccio, también hay una bella pintura del siglo XIII.

Recorriendo Corfú, sus edificios, plazas, paseos, comercios , todo muy bonito y claro, de compras, hay de todo, joyas en oro y plata, buena cerámica, un licor que se llama Kumquat y que viene en unas botellas muy guapas, artesanía en madera de olivo. Compré jabones de aceite de oliva y diversos olores (€4 cuatro jabones), unas gafas “Chanel” (€12) un cinturón “Versace” (€5), esta isla es el paraíso de las falsificaciones, encontraréis imitaciones de todas las grandes marcas, en fin una gozada para los que gusten de las compras. También compré una especie de rosario, con unas bolas tranquilizadoras (creo fueron €4) que también son un regalo original.

En nuestra vuelta al puerto pasamos por el Fuerte Nuevo, la plaza Zabitzanou, como estaba en esos días que te gusta comprar, en la Aduana compramos cigarrillos Marlboro (€14,50), unas galletitas con chocolate (€0,90) unos jabones de aceite de oliva y miel que huelen de maravilla (6 jabones €3,30), un dulce halva, que es como turrón (€2) unos “bombones” de miel y almendras (€4,40).

Por la tarde como siempre diversos entretenimientos, bailes, juegos, etc. A eso de las 19:00 el Capitán y el Director de Cruceros Bruno Carletti respondían a las preguntas que se les hacía respecto al buque, así nos enteramos, por ejemplo que cuando lo construyeron iba a ser un barco de guerra y al final se lo convirtió en crucero. Hoy era la segunda noche de gala así que había que ponerse elegante. Como había avisado que era el cumpleaños de mi marido, le trajeron, después de la cena , una tarta de cumpleaños con una velita y le cantaron el cumpleaños feliz. Muy bonito. El espectáculo fue de los mejores (no sé si en honor a Lorenzo…), sobre los cuatro elementos, y al final un hermoso desfile de banderas.

A las 24:30 un juego muy divertido: Cristianos contra moros en el que todos nos involucramos. Al final discoteca. ¡Qué dura es la vida del crucerista!!